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Hay diversas razones por las que podemos necesitar instalar una aplicación en Android desde ‘orígenes desconocidos’, ya sea porque no está disponible en Google Play o por el mero placer de utilizar otros portales de descarga alternativos y seguros a pesar de lo que pueda decir la alerta de nuestro antivirus.

Para poder descargar apps en este formato es necesario autorizar que nuestro smartphone las acepte, a través del panel de ajustes.

Cómo configurar nuestro teléfono para descargar APKs

Para permitir la instalación de aplicaciones en formato APK desde nuestro teléfono Android tan sólo deberemos dirigirnos a Menú > Ajustes > Seguridad y marcar la casilla ‘Orígenes Desconocidos’ o ‘Fuentes Desconocidas’, así de sencillo.

Una vez hecho esto, aparecerá el siguiente mensaje: “Su dispositivo y sus datos personales son más vulnerables a ser atacados por aplicaciones que provengan de fuentes desconocidas. El usuario acepta ser el único responsable de daños en su dispositivo o pérdida de datos que se pueda derivar del uso de estas aplicaciones”. Sólo habrá que aceptar las condiciones y ser cauteloso con la procedencia de las app que descargamos, aunque esto es algo que debemos tener en cuenta dentro y fuera de Google Play. En el caso de nuestra pagina, todas nuestras aplicaciones son probadas individualmente por nuestros editores y evaluada su fiabilidad a través del servicio VirusTotal.

Aún así, es recomendable revisar siempre los permisos de todo aquello que instalamos en nuestro smartphone y asegurarnos de no permitir a aplicaciones sospechosas acceder a nuestras contraseñas, contactos, mensajes privados o dar el consentimiento para que envíen SMS. Estos permisos no dependen del lugar de donde se descargue la app, sino de la propia naturaleza de la misma.

¿Cómo instalo una APK?

Una vez descargada la aplicación que queremos tener en nuestro disposito Android podremos instalarla manualmente desde fichero de extensión .apk que hayamos obtenido, pudiendo acceder al mismo tanto a través del apartado ‘Descargas’ de nuestro smartphone, desde un gestor de archivos para Android tipo ES File Explorer o directamente en la barra de notificaciones del teléfono. Una vez localizada, sólo tendremos que pulsar sobre ella y se instalará automáticamente.

Si es la primera vez que lo hacemos, lo más probable es que salte un mensaje de aviso similar a este: “Instalación bloqueada: Esta aplicación es peligrosa, contiene códigos que podrían eludir las protecciones de seguridad de Android. Para protegerte, Google ha bloqueado la instalación de esta aplicación”.

La mayoría de dispositivos vienen preconfigurados para permitir únicamente las aplicaciones descargadas de Google Play, de hecho, Google Play Services se instala y actualiza automáticamente en nuestro Android para darnos una mayor seguridad verificando todas las aplicaciones que instalamos; por ello nos aparece el mensaje de advertencia, pero con marcar la casilla “entender que la aplicación podría ser peligrosa” y hacernos responsables de ello, podremos instalarla sin problemas.

Si deseas cambiar esta configuración para que Google no salte cada vez que instalas una APK, tendremos que dirigirnos a Ajustes de Google > Verificar aplicaciones y desmarcar la casilla. Una vez completado este proceso, podremos tener cualquier aplicación instalada en nuestro teléfono Android aunque no se encuentren disponibles en la tienda oficial de Google.